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Theo Guédez. Donde los sueños abundan
La propuesta pictórica de Theo Guédez, artista autodidacta residenciado entre Caracas y Europa, se nos presenta como una intrincada cartografía vernacular que retrata un territorio complejo minado de tensiones internas –sociales y económicas–, a partir del cual concibe una realidad distintiva, centrada en un sistema de representación propio.
Su práctica creadora transita alrededor de la percepción del barrio y su idiosincrasia cultural. Una reflexión que opera a partir del más honesto deseo por otorgarle visibilidad a los diversos sectores, ubicados al margen de los centros urbanos. El trabajo de Theo se deslinda así de los géneros y formulismos estéticos tradicionales para trazar otra historia de la pintura, aquella que se ubica en los límites de las subculturas vigentes. El neo expresionismo enérgico y espontáneo de sus composiciones, documenta, desde el más legítimo apego al barrio y al espíritu heroico de sus habitantes, una esencia mixta y contradictoria, representada en rotundas imágenes que evidencian el sentido de comunidad y la naturaleza de su estructura colectiva.
Donde los sueños abundan, su primera exposición individual en Venezuela, presenta un poderoso repertorio visual saturado de códigos culturales que debemos descifrar. En su desarrollo, se detiene en aquellos tópicos y protagonistas determinados por las convenciones y estereotipos excluyentes. Aún en la distancia global y, precisamente por la necesidad de recuperar una genealogía de historias, paisajes, retratos, costumbres y objetos comunes, atesorados en su archivo de memorias, el artista nos entrega, a manera de cronista visual, una forma de (re)crear mediante la imaginación, su arraigo al contexto. Cada imagen se constituye en documento gráfico que ocupa un lugar significante y simbólico en lo que pareciera próximo a una narrativa autobiográfica. Sin embargo, sus representaciones pictóricas construyen el referente de una iconografía contemporánea en términos más amplios donde lo caribeño y el sincretismo latinoamericano se perciben como un estado mental constante.
Ruth Auerbach
